1943 Nov 6 - mi viejo más loco que nunca pero trabajando duro...


6 de noviembre de 1943

Querido Blue-Eyes:

Hasta ahora puedo contestar tu carta del 17 de octubre último, porque debido a una "volcaneada" (recorrimos de pies a cabeza y de cabeza a pies el Ixtacihuatl y en seguida la sierra de lado a lado en 53 horas) estuve casi ciega durante muchos días. Es hasta ahora cuando empiezo a ver normalmente y cuando se me van quitando los ardores horribles que tenía. El oculista dice que dentro de una semana estaré completamente bien. No me vayas a regañar ni vayas a enojarte y decirme que deje de subir a la sierra y de escalar las montañas; debes comprender que no teniéndote aquí para pelear, discutir y gastar mis energías, necesito emplearlas en algo para no reventar.

En este mes tengo todas las pruebas finales del primer año en la Escuela de las Artes del Libro y tengo tanto que estudiar y tántas cosas qué hacer que hay días en los que duermo dos o tres horas. Pero esto ayuda, todo esto ayuda a no pensar en verdades tan amargas que no podrían soportarse si no se emborrachara uno con libros y con volcanes.

Mamá está un poquito mejor dentro de su estado delicado; Gabriel ha pasado un mes bastante enfermo; mi viejo más loco que nunca pero trabajando duro y...!el tiempo sigue su marcha!

Escribe siempre que puedas hacerlo no dejes de escribir hasta el día en que puedas tocar el timbre de la casa # 1106 de la avenida Coyoacán y oiga yo la voz de Silvia gritando "Allí está el señor Henry."

¡Hasta la vista!

Esperanza




November 6, 1943

Dear Blue-Eyes:

I am only now able to answer your letter of October 17 last, because due to a "volcaneada" (we went from foot to head and from head to foot up Ixtacihuatl and then the sierra from side to side in 53 hours) I was almost blind for many days. It is only now that I am beginning to see normally and the horrible burning I had is going away. The eye doctor says that within a week I will be completely fine. Don't scold me and don't get angry and tell me to stop climbing the mountains; you must understand that not having you here to fight, argue and waste my energies, I need to use them on something so I don't burst.

This month I have all the final exams of the first year at la Escuela de las Artes del Libro and I have so much to study and so many things to do that there are days when I sleep two or three hours. But this helps, all this helps to not think about such bitter truths that could not be endured if one didn't get drunk on books and volcanoes.

Mom is a little better in her delicate state; Gabriel has been quite sick for a month; my old one is more crazy than ever but working hard and ...! time follows its march!

Write whenever you can, don't stop writing until the day you can ring the doorbell of house # 1106 Avenida Coyoacán and I hear Silvia's voice shouting "There is Mr. Henry."

Hasta la Vista!

Esperanza